¡Basta Ya de Violencias Contra las Mujeres!
Escrito por Movimiento Feminista de Nicaragua   
Miércoles, 25 de Noviembre de 2015 21:20

Hoy como cada año, mujeres de todo el país nos  tomamos las calles para decir basta ya de todas las violencias contra las mujeres. Respeten nuestra humanidad y nuestra integridad. Tenemos derecho a vivir sin violencia, con justicia y con libertad.

Las organizaciones y redes de mujeres nicaragüenses nos hemos movilizado durante 40 años consecutivos para denunciar todas las formas de violencia que sufrimos las mujeres en las casas, en la calles, en el país. También nos hemos tomado las calles para demandar al Estado la adopción de leyes, políticas y acciones contundentes para prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres.

En 1999 las feministas latinoamericanas y del caribe demandamos a la Organización de Naciones Unidas la proclama del 25 de noviembre como Día Internacional de Lucha contra la Violencia hacia las Mujeres, fecha en que honramos la memoria de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, asesinadas por la Dictadura de Leónidas Trujillo un 25 de Noviembre de 1960 en República Dominicana. Un crimen que simboliza la lucha de las mujeres  en favor de la democracia, así como la violencia ejercida contra las mujeres por parte de regímenes totalitarios.

Es gracias a las luchas comprometidas y valerosas de los movimientos de mujeres y feministas nicaragüenses que desde la década de los 90 contamos con  un marco legal que sanciona la violencia de género y mecanismos para su aplicación. Es también gracias a nuestra capacidad propositiva que en la actualidad contamos con la Ley Integral contra la violencia hacia las mujeres (Ley 779) la cual incluye la tipificación de delitos como la violencia psicológica, la violencia económica y el femicidio.

Este 25 de noviembre volvemos expresar nuestra justa indignación frente a la persistencia de la violencia sexista, machista y patriarcal que continúa provocando dolor y sufrimiento a miles de niñas, adolescentes, jóvenes y mujeres mayores de nuestros país, perpetradas por hombres comunes y corrientes, conocidos y desconocidos, jóvenes y adultos, que fueron educados para despreciar y someter a las mujeres.

Estamos justamente indignadas frente a los evidentes retrocesos  por parte de las instituciones públicas responsables de la prevención de la violencia machista y de la sanción a los agresores.  Frente a estos graves retrocesos nosotras continuamos denunciando el carácter patriarcal y misógino del Estado nicaragüense, que minimiza la gravedad de la violencia contra las mujeres y se convierte en cómplice de los agresores.

Entre las principales evidencias que de esta realidad queremos destacar por su gravedad:

1. La reglamentación inconstitucional de la Ley Integral contra la violencia hacia las mujeres, que  pretende  cambiar el objeto y ámbito de aplicación de la misma, así como los mecanismos de protección y la política para prevenir y sancionar la violencia contra las mujeres.

2. El reglamento y la política definen a la familia como objeto de protección, en abierta contradicción con la Ley 779 la cual establece como responsabilidad del Estado la protección a  las mujeres víctimas de violencia de género.

3. El uso indiscriminado e ilegal de la mediación y la imposición de las Consejerías Familiares como mecanismos para impedir que las mujeres denuncien la violencia machista.

4. La distorsión de la información estadística para ocultar las verdaderas dimensiones de la violencia que sufren las mujeres y la falta de acceso a la información  pública.

5. La invisibilización de los femicidios en abierta violación a lo establecido en la Ley 779 que lo define  como delito grave contra las mujeres, que puede ser cometido tanto en el ámbito privado como en el público.

6. La falta de acciones contundentes para prevenir el abuso sexual contra niñas y adolescentes a pesar de que durante los últimos cuatro años 6,404 niñas entre 10 y 14 años quedaron embarazadas producto de la violación, de acuerdo con información oficial del l Ministerio de Salud.

7. La penalización absoluta del aborto y el silencio de la Corte Suprema de Justicia ante los recursos de inconstitucionalidad interpuestos desde el año 2007, en abierta violación a la Constitución Política de la República.

8. La manipulación de las creencias religiosas de la población como estrategia para negar a las mujeres el derecho a la vida, la libertad de conciencia y la integridad.

9. La total exclusión de las organizaciones de la ruta de atención integral como estrategia para impedir el acompañamiento solidario a las víctimas que denuncian, dejándolas más vulnerables frente a los abusos cometidos por jueces y policías.

10. La violencia institucional que enfrentan las mujeres que se movilizan en defensa de sus tierras, los recursos naturales y los derechos ciudadanos en general. De manera particular  alertamos sobre los impactos negativos que la construcción del  canal interoceánico tendrá sobre la vida de las mujeres y sus derechos.

Este 25 de noviembre queremos demandarle una vez más a la sociedad y al Estado de Nicaragua que asuman la responsabilidad de detener todas las violencias contra las mujeres, las que se comenten en contra de sus cuerpos, de sus vidas y de sus territorios.

Las mujeres nicaragüenses no estamos solas, somos parte de un movimiento global que continuará defendiendo el derecho de todas las mujeres a vivir seguras y sin miedo en nuestras casas, en nuestras comunidades, en nuestros países y en el mundo entero.

NI LAS MUJERES NI LA TIERRA SOMOS TERRITORIO DE CONQUISTA.
NO A LA VIOLENCIA MACHISTA

Managua, Nicaragua  25 de noviembre 2015.

 

¡Día Internacional de Lucha contra la Violencia hacia las Mujeres!

 


 

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